Lady L

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martes, 26 de junio de 2012

Filosofía barata

Tengo un grupo de amigas con las que hay que planear los encuentros con un mínimo de dos semanas de anticipación. Que los chicos, que el trabajo, que el viaje, que la pindonga mocha. Obviamente, nos vemos cada vez menos. Pensaba el otro día en cómo se ha perdido esa costumbre de la visita"paracaidista", esa que caía sin avisar y se instalaba, con suerte con una docena de facturas o un paquete de bizcochitos. Y hablo en pasado porque creo que eso no existe más, o por lo menos no acá en Buenos Aires.

Hoy es impensable una visita sin al menos un mensaje de texto previo, por más confianza que haya. Todo es tan planificado, tan agendado de antemano  que pareciera que hay algo que se perdió en el camino. La espontaneidad, digamos, la sorpresa del "Che, ¡mirá quién vino!", o de encontrar al visitado en pijamas o en situaciones poco decorosas. 

¿Será que nos volvimos demasiado celosos de nuestro tiempo y por eso ponemos tantas trabas para compartir un simple momento? ¿O será que de repente nos hicimos grandes?

13 comentarios:

  1. adoro la gente que me cae de sorpresa, así esté en pijamas...
    Si, desde que vivimos atrás de una laptop y con un celular en la mano adosado las 24 horas del día, "caer de sorpresa" es un milagro.

    Me encantó tu post! besos

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    1. Jaja igual ahora que pienso... hay gente que no me gustaría que me caiga de sorpresa. Podría hacer una lista negra!!

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  2. Si a mi me pasa lo mismo . Salvo cuando viajo al interior donde la hermosa costumbre de no avisar y encontrarse permanece intacta

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    1. Es cierto! En Azul yo sigo haciendo visitas paracaidistas y es lo más normal del mundo. Besos Sienna!!

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    2. Si chicas es una de las cosas que mas me gusta , las distancias cortas y las visitas improvisadas.

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  3. Es verdad Sienna!! cuando voy a Azul, o a Salta caigo de sorpresa a todo el mundo!!! besos

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    1. Marietta nos vamos a tener que encontrar en Azul!! Jajaja

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  4. En el interior es así.. caes de sorpresa y no pasa nada!!! Como mucho le avisas dos cuadras antes de llegar a la casa

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    1. Nené te voy a caer de sorpresa en cualquier momento jaja

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  5. Dale Route!! voy el finde del 09 de Julio!!! besos

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  6. Quizás, con los años, cuando los chicos crecen, dejamos que los maridos sean más autónomos y aprendemos a reconocer donde está lo importante, se vuelve a esa sana costumbre. Ayuda el mensajete previo, y es preludio de un buen momentos, con ganas de encontrarse. La espontaneidad vuelve...solo hay que darle tiempo.
    Besos

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  7. Eso se pierde, es verdad! Un poco culpa de la tecnología (los mensajes que nos hacen comunicar cualquier cosa, tipo "Che, se me cruzo un perro en la calle, llego treinta segundos más tarde") y también de las responsabilidades...

    Nos vamos volviendo viejos. :(

    Abrazo!

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  8. Que lindo post! Es cierto, ya no se acostumbra eso de caerse sin previo aviso.. minimo algunos mensajitos se cruzan antes..
    Aunque el otro dia mi hermano me cayó a las once de la noche asi sin avisar (estaba andando en bici por la zona y decidio pasarse a saludar). Con mi novio estabamos viendo una peli en la cama, asi que me agarro en pijamas!! (que obvio ni me molesté en cambiarme). estuvimos charlando un rato, y fue linda la sorpresa inesperada (pero cuando sonó el timbre nos miramos sorprendidos preguntandonos quien seria, eh!).
    Beso

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