Lady L

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martes, 18 de octubre de 2011

#brevísima


IMPORTANTE: el presente post debe ser leído sin ánimo ofensivo o acusatorio alguno y al simple y mero efecto de provocar si no una sonrisa, al menos una reacción, mueca o gesto cómplice entre los lectores. Bajo ningún aspecto podrá considerarse ninguna de las afirmaciones que siguen como ataques directos y/o indirectos a la persona y/o bienes del lector. La propietaria de este blog no se responsabiliza por el daño moral que pudiera causar cualquier interpretación en contrario.

Aclarado lo anterior, empiezo: tengo una cuenta de Twitter pero todavía no le agarro mucho la onda. Lo abro muy poco, y sí, admito que me cuelgo leyendo comentarios ingeniosos que seguramente no se me ocurrirían, o me entero de alguna que otra propuesta que me parece interesante. Sigo a personalidades muy disímiles, de todo tipo, rango y color, también a algunas publicaciones, marcas e instituciones. Cada tanto “tuiteo” o “retuiteo” alguna boludez.

Sabía que Twitter significaba gorjeo en inglés (de ahí el famoso pajarito) o “parlotear, cotorrear”, pero por pura curiosidad busqué en el diccionario el significado de twit, y me encontré con que es un sustantivo que significa imbécil. ¿Lo habrán tenido en cuenta a la hora de bautizarlo? No puedo creer que no.

Pareciera que la palabra Twitter encierra un claro doble sentido en el que el pajarito azul se puso al frente para engañar a la gilada y en realidad no se trata de otra cosa que de un gran amontonamiento de imbéciles (ya dije que me incluyo) exteriorizando sus pensamientos en 140 caracteres. Algunos más imbéciles que otros, claro está, como los que creen digno de compartir con el mundo que están esperando que llegue la pizza o que se les despintó la uña del dedo meñique. Se me ocurre que el máximo exponente de imbecilidad podría ser Grace Alfano, o Paris Hilton, y en el otro extremo estarían capos como Stephen Hawking o Damon Lindelof.

¿Tienen cuenta de Twitter? ¿A quiénes pondrían en el top 3 de la imbecilidad?

Imagen: Flickr (no sé cuál es la fuente original...)



17 comentarios:

  1. Confieso sufrir del mismo síndrome de perplejidad ante el Twitter. Tengo cuenta? Sí, tengo. Pero realmente no la uso. No la tengo incorporada, ni siquiera ahora que tengo la "app" correspondiente en la Black Berry nueva, que escapó de las limitaciones impuestas por la gente de sistemas del laburo.

    Creo, luego de haber mirado intermitentemente distintos perfiles (sin suscribirme, para que no me tape la ola), que lo que más valoro de Twitter es ese momento de generosidad del que comparte algo interesante, sin condimentarlo más que con una breve recomendación y una referencia al tema. Será porque prefiero conocer al titular del perfil a través de la idea que me formo de él por lo que me recomienda, más que conocerlo en forma directa. Mi forma de verlo es una evolución 2.0 del "dime con quién andas..." Yo diría "dime qué me recomiendas y te diré quién eres."

    Calculo que esta forma de ver el twitter me condena a seguir siendo un outsider que agrega "seguidos" muy a cuentagotas. Pero me siento cómodo con esa variante. Respeto todas, claro, siempre que no se me impongan.

    PAC

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  2. no tengo cuenta ni sigo a nadie, me parece intracendente para mi vida.

    es más creo que resta...pero bué puede que sólo me esté resistiendo a ésta nueva realidad cortita y al pie...

    alelí

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  3. No entiendo la gente que twittea y no es famosa.
    Lo peor es que varios esperan que uno lo sigas. Te dicen: Dale, abrite uno y seguime. -¿¿Para?? - No sé, para seguirme... ¡DIOS! Sería lo último que haría en mi vida, seguir las pelotudeces que ponés, no te llamo por teléfono para tu cumpleaños, mirá si te voy a seguir por Tweet.
    Ahora que me sé que en la esencia misma de la palabra vive el adjetivo IMBECIL, me cierra todo, de repente se abre una claridad.
    "Camino a lo de Mummy" "De compras con Mummy y Pily" "Agotada de tanto shopping" "Feliz con mi nueva bikini" "Mostrandole la bikini a mi cucuruchito" ¿¿Se puede ser tan pelotudaaaaaaaaaaaa??? Si alguien se entera que mi mujer hace estoy comentarios durante el día, avisenme así me corto las pelotas!!!
    No al Tweet, es realmente un hecho decerebrado!

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  4. Mario: ok, qué lástima, me interesaba armar un ranking de imbecilidades :)
    PAC: La manía de sumar "seguidos" no es tan grave como la obsesión de algunos de sumar "seguidores". Cuál sería tu top 3?
    Alelí: totalmente respetable, es más, no sé cuánto va a durar mi cuenta, veremos.
    Anónimo: Jaja, es lo que dije antes, el hambriento de seguidores es un poco molesto. O el que pide que retuiteen sus boludeces. Hay de todo en la viña del Señor.

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  5. Yo tengo. Me da mucha risa tratar de resumir 15645656478165156467889 caracteres en 140. En mi top 3 Kim Kardashian, Britney Spears y Ashton Kuthcher.

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  6. Rout, yo me hice hace poco una cuenta de Twitter. La verdad es que la hice para promocionar mi blog y porque suelo vender cosas y me pareció una buena idea pero despues me veo "chateando" con otros usuarios y diciendo grandes, perdón por el término, pelotudeces. Hay que tomarlo con un instrumento que no "suma" a la cultura sino que entretiene.

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  7. Como tengo dicho, todo avance tecnológico ha nacido para hacer de este mundo un lugar más racional y coherente. Y el Twitter es uno de ellos. En mi caso, me ha resultado muy útil ya que el método que usábamos antes para publicar nuestras ideas nos estaba causando problemas.
    En el barrio a alguien se le había ocurrido poner un pizarrón de amplias dimensiones en el centro de la plaza y asignar un espacio en dicho pizarrón para que cada vecino pudiera escribir lo que se le antojara pero limitado a 140 letras por anuncio. Así que todas las mañanas nos congregábamos en la plaza y escribíamos algo en nuestro espacio previamente asignado. Al principio eran sólo avisos mercantilistas –los comerciantes son los que primero se aprovechan de estas cosas- y podíamos leer frases como “Vendo FIAT 600. Buen estado” o “Paleta sanguchera m$n 5 los 100 gr. La despensa de Bataglia”. Después comenzaron a aparecer mensajes más personalizados. Los novios se escribían frases románticas; los arquitectos recién egresados recibían felicitaciones; las futuras mamás, la enhorabuena, etc.
    Con el paso del tiempo el barrio se fue poblando cada vez más y más y el pizarrón tuvo que ampliarse debido a la gran cantidad de mensajes que se iban escribiendo. Alguien sugirió que convenía ir borrando los mensajes viejos y utilizar ese espacio para los nuevos, pero el promotor de la idea parece que era de otro barrio y su moción fue deliberadamente ignorada.
    De a poco empezaron los problemas. Debido al tamaño del pizarrón, había espacios donde resultaba más difícil escribir. A quienes se les había asignado la parte superior se quejaban porque para escribir necesitaban la ayuda de algún amigo que les hiciera piecito o debían hacerse de una escalera. Esta dificultad motivó la aparición de varios vivos –albañiles la mayoría de ellos- que alquilaban escaleras por una modesta suma. Otros cobraban por hacerle piecito al eventual perjudicado. Tiempo después me enteré que gente de la municipalidad hacía sucios negociados concediendo espacios del pizarrón al mejor postor. Gente inescrupulosa si las hay.
    El pizarrón fue creciendo hasta alcanzar proporciones desmesuradas. La municipalidad contrató a una empresa para que pusiera autoelevadores a disposición de aquella gente que debía escribir sus mensajes a una altura superior a 2 metros. También contrató un servicio de seguridad privada porque hubo muchas denuncias de personas que alegaban que sus mensajes eran modificados durante la noche por vaya a saber qué clase de vándalos, produciendo de esta manera un sinfín de consecuencias desastrosas: ruptura de matrimonios, enemistades, suicidios, etc.
    La plaza iba quedando chica y hubo que extender el pizarrón hacia las manzanas adyacentes. Varios edificios tuvieron que ser demolidas para cederle el paso, incluyendo la escuela normal.
    La gente dejó de leer diarios y de ver la tele porque todo lo importante se decía en ese gigantesco pizarrón. Hubo muchos que lo adoraban como a un fetiche alegando que entre sus infinitos mensajes se escondía la Sabiduría. Y esta incipiente religión trajo detractores y éstos, a su vez, detractores de detractores. Se armaban intensos debates, los cuales, lógicamente, eran transcriptos en el propio pizarrón. La mayoría de ellos terminaban a las trompadas. La guerra civil estaba por empezar.
    Por suerte, se inventó el Twitter y la gente empezó a ignorar al pizarrón. Pasados unos días nadie lo visitaba y los vecinos empezaron a verlo como un estorbo. De a poco lo fueron rompiendo hasta reducirlo a astillas. Muchos de sus restos sirvieron para hacer asados. Hoy ya no queda nada.
    Yo aún guardo un pedazo de aquel monstruoso pizarrón que acaparó por tanto tiempo nuestra atención hasta volvernos idiotas. Lo tengo guardado en el ropero y cada tanto lo encuentro de casualidad mientras busco otra cosa, como si ese pedazo de madera vetusta tuviera ganas de mostrarme lo que conserva escrito, el último resto de su Sabiduría: “puto el que lee”.

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  8. La verdad yo tengo pero lo termino usando para comunicarme con las chicas.No es exactamente lo que más me divierte. El otro día un usuario que sigo puso que los que están en twitter ahora son los mismos que jugaban al tetris antes.Hay gente ingeniosa pero también mucho bobo.Besos

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  9. @routeless:tengo cuente en tw.no la uso.beso.

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  10. Yo tmb tengo cuenta, al pedo... entro poco porque no entiendo mucho.
    A la que en cualquier momento le pego un UNFOLLOW es a Flavia Palmiero... me tiene harrrta publicitando "La ola.." (era un lindo recuerdo) y cosas como "me voy a la pelu", "hoy cocino"..

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  11. ¿Te odio Rout es el nick de Alejandro Dolina?

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  12. jajaja... soy una IMBECIL con mayusculas...tengo una apuesta con amigas que si llego a 100 followers antes del viernes no pago el chupi, la idea es que la gente me siga sin pedir que me sigan.. (igual lo sugiero @danicabiro )...hasta que no me responda jacobo winograd no me voy a considerar realizada en tw.... lo segui a ernesto arriaga mucho tiempo pero me llenaba de msjs tipo "usa el casco... tu cabeza no es el paragolpes de tu moto" y me harto. creo que el es el mas imbecil, me divierto mucho con un personaje cache a morir, @lachicasabrina me rio a carcajadas.. y otro que es @bastadecachudos que para mi es mi tio pero no me lo dice jajaja. no se, blackberry es un vicio... y todo lo que adorne a mi telefono es vicio tb. x ende facebook, msn, bbm, tw... besos routttt

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  13. Al final, la única que "me" hizo la tarea fue la alumna Crai!
    Te odio Rout, te pasaste. Para cuando un post como invitado? Mario, no es Dolina pero también es Alejandro, creo.
    Valeria: Bienvenida! Nunca vi los tweets de Flavia pero me puedo dar una idea por lo que decís!
    Danielita: si es por una apuesta te voy a tener que seguir... después voy a chusmear esas sugerencias, qué chapa debe estar tu tío!

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  14. Yo soy así. Pese a que tengo que escuchar cosas como las que publiqué hoy. Por Dior.

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  15. Me negaba a sacar el twitter porque es too much!! No es de mi generación, necesito tiempo y emitir algo en 140 caracteres que nunca me alcanzan. Lo saqué como Marietta, mi seudónimo para promocionar mi blog. Y cuando estoy aburrida, debo decir que con las chicas twitteras me divierto sobre todo conectada desde el celu. Ranking no puedo hacerte porque no sigo a nadie que no me interese.
    Los de la Sra PresidentA me sacan de quicio. Entro poco...

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  16. Valeria, esa debe ser una falsa Flavia Palmiero. No puedo creer en un twit escrito por ella que diga "Hoy cocino".

    A Ernesto Arriaga le digo que nunca usé casco. Que me ch(prip)evo.

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